¿Qué pasó? La Corte Suprema de Estados Unidos anuló este viernes la histórica sentencia conocida como ‘Roe contra Wade’, que desde 1973 garantizaba el derecho al aborto en el país.
Punto importante. Esta decisión no convierte en ilegales las interrupciones del embarazo, sino que hace retroceder a Estados Unidos a la situación vigente antes de la sentencia Roe v. Wade de 1973, cuando cada estado era libre de autorizarlas o no.
Atenti. Con esta decisión, respaldada por la mayoría de jueces conservadores del tribunal por 6 votos a 3, se abre el camino para que el aborto pueda ser ilegalizado en los estados que así lo decidan. Se espera que aproximadamente la mitad de los estados en el país introduzcan nuevas restricciones o prohibiciones. Trece de ellos ya aprobaron anticipadamente leyes que prohibirán de forma automática el aborto tras el fallo de la Corte Suprema. Y es probable que otros implementen con rapidez nuevas restricciones.
Declaraciones. “La Constitución no hace ninguna referencia al aborto y ninguno de sus artículos protege implícitamente este derecho”, escribió el juez Samuel Alito, en nombre de la mayoría en la Corte, y añadió: “Roe v. Wade debe ser anulado”. “Es hora de devolver el tema del aborto a los representantes elegidos por el pueblo”, a los parlamentos locales, escribió Alito, un mensaje muy parecido al que se filtró en mayo pasado en los medios provocando importantes manifestaciones en todo el país.
Además. Por su parte, los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan, en una opinión disidente conjunta, criticaron duramente a la mayoría y lamentaron la decisión. “Con tristeza, por esta Corte, pero más por los muchos millones de mujeres estadounidenses que hoy han perdido una protección constitucional fundamental: disentimos”, sostuvieron según consignó la cadena de noticias CNN.
Tené en cuenta. La sentencia es el resultado de un esfuerzo realizado durante décadas por los críticos del aborto, que buscan devolver más poder a los estados, y que se pudo materializar gracias a la sólida mayoría conservadora que quedó en la Corte Suprema tras el paso de Donald Trump por la Casa Blanca.