¿Qué pasó? Mahan Sadrat forma parte de las 11 personas condenadas a la pena capital en relación a las manifestaciones que sacuden al país desde hace tres meses tras la muerte bajo custodia de Mahsa Amini, una joven kurda iraní de 22 años detenida por la policía de la moral por no llevar puesto el velo correctamente.
Punto importante. Sadrat fue declarado culpable el 3 de noviembre por ser un “mohareb” (estar en guerra contra Dios), tras haber sacado un cuchillo y sembrar el miedo alrededor suyo, había informado la agencia oficial de noticias Irna.
Atenti. Por su parte, el joven niega haber sacado un cuchillo, aunque admite que prendió fuego a una moto, según Irna. Su condena a muerte había sido suspendida la semana pasada.
Además. Dos condenados a muerte, ambos de 23 años, ya fueron ejecutados, tras ser condenados por haber matado o herido a miembros de las fuerzas de seguridad o paramilitares.