¿Qué pasó? Luciano Bonamaison, amigo de Fernando Báez Sosa, fue categórico: “Máximo Thomsen le pegó una patada, con odio, brutalidad y con intención de matar”. Fue en el medio de la calle, recordó, tras haber sido expulsados ambos grupos del boliche Le Brique de Villa Gesell.
Punto importante. El amigo de Báez Sosa habló de una “emboscada” hacia ellos, aunque buscaban alguien en particular, “a Fernando, ellos querían atacarlo a él”. “¿Reconoces a otras personas como agresores de Fernando?”, le preguntó el fiscal Juan Manuel Dávila. “No”, dijo Bonamaison, pero sí aclaró que el grupo de rugbiers arengaban “¡vamos! ¡vamos, negro de mierda!”.
Declaraciones. Tras el ataque y la caída de Fernando, “una chica le hizo reanimación cardio vascular” y “llamamos una ambulancia”, contó Bonamaison que dijo que “no podía creer” lo que había pasado y que quedó en “estado de schok”. El defensor Hugo Tomei le intentó señalar una contradicción sobre su declaración en instrucción, a lo que el querellante Fernando Burlando dijo que eso era “una amenaza”. Por lo cual, la presidenta del Tribunal, Claudia Castro, le pidió que “modere” su interrogatorio.
Atenti. Este miércoles también declaró el jefe de seguridad del boliche Le Brique, donde se originó la pelea entre los rugbiers y Fernando Báez Sosa. Alejandro Muñoz señaló: “Nunca vi nada igual, era saña. Hace 20 años que trabajo de esto y nunca vi nada igual, todo patadas”.
Además. A su vez, relató que le costó sacarlo a Máximo Thomsen del boliche luego de un incidente que protagonizó junto a su grupo y el de Fernando. También recordó que tuvo que sacarlo con otro compañero por una puerta lateral y que dio aviso a la Policía en la puerta por el estado violento en que estaba Thomsen.
Fuente: NA.