¿Qué pasó? En su primera intervención en la cumbre del G7 que se celebra en Alemania, el presidente Alberto Fernández pidió por la necesidad del “diálogo” para alcanzar el “cese de hostilidades” entre Rusia y Ucrania, al tiempo que abogó “por la construcción de una nueva arquitectura financiera internacional que incluya a las periferias del mundo”.
Punto importante. “El problema no es la pobreza. El problema a resolver es el sistema económico que la genera y permite que la riqueza se acumule en unos pocos”, subrayó el mandatario nacional ante los líderes de Alemania, Estados Unidos, Canadá, Japón, Reino Unido, Italia y Francia.
Declaraciones. Respecto de la guerra, Fernández recordó: “Desde un comienzo reclamamos el cese de las hostilidades. Ahora necesitamos impulsar el diálogo entre las partes involucradas. La historia da cuenta de que cada conflicto terminó, con acuerdos logrados sobre la base de iniciativas concretas. Tomemos ya la iniciativa en procura de la paz. Hagámoslo antes que sea demasiado tarde”. Además, subrayó que el conflicto entre Kiev y Moscú es una “una tragedia” que afectó a los flujos comerciales y la logística, alcanzando “un punto crítico”.
Atenti. A la vez, hizo un llamado a reflexionar sobre el pasado y recordó que “el 27 de junio de 1947, hace hoy 75 años, se inició la conferencia de París que abrió el camino al Plan Marshall que ayudó a Europa a recuperarse tras la Segunda Guerra Mundial”. “En América Latina y el Caribe no soñamos con un nuevo Plan Marshall. Nunca tuvimos uno. Pero soñamos con un nuevo orden internacional donde los esfuerzos se equilibren y las ventajas se distribuyan con criterios de equidad. Soñamos con no ser discriminados por el mundo central y condenados a la marginalidad y al olvido”, aseguró el jefe de Estado.
Además. En cuanto al segundo punto central de su discurso, la ingeniería financiera internacional, el mandatario argentino manifestó: “Quiero alzar mi voz en esta Cumbre para abogar por la construcción de una nueva arquitectura financiera internacional que incluya a las periferias del mundo. Los Derechos Especiales de Giro emitidos por el FMI constituyen una oportunidad para mejorar las condiciones sociales”.
Tené en cuenta. En un nuevo llamado a la comunidad internacional, sostuvo que “no deben ser instrumentos destinados a engrosar las reservas de bancos centrales que no los necesitan”, sino que “deben tener un sentido social capitalizando bancos regionales para financiar infraestructura requerida para el desarrollo que el cambio climático además exige”.