¿Qué pasó? Distintos dirigentes políticos y sindicales se expresaron luego con respecto al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que presentó ayer el Gobierno nacional y que oficializó este jueves en el Boletín Oficial.
Punto importante. Los comentarios llegaron tanto del presidente como desde los distintos partidos que integran la oposición, que se posicionaron mayormente en contra, a los que también se sumaron líderes sindicales del país.
Atenti. Con respecto a los cacerolazos, el presidente Javier Milei señaló hoy que “hay gente que sufre el síndrome de Estocolmo y están abrazados al modelo que los empobrece”, y agregó que “hay más” en relación al paquete de leyes que enviará al Congreso.
Declaraciones.
Axel Kicillof. «Le faltó decir «democracia: ¡afuera!»», sostuvo el gobernador de Buenos Aires en sus redes sociales, y añadió: «Se propone privatizar todo, desregular todo, destruir derechos de los trabajadores, arrasar con sectores completos de la producción, rifar los clubes de futbol y el patrimonio de los argentinos”.
Alberto Fernández. «Cuando la democracia está cumpliendo 40 años de continuidad, nuestro país asiste a un hecho de extrema gravedad institucional jamás visto. El Poder Ejecutivo, en un acto de claro abuso de poder, ha avanzado sobre las atribuciones exclusivas del Poder Legislativo», manifestó el expresidente y señaló que el DNU es «ilegal» y «la República está en peligro».
Myriam Bregman. La diputada del Frente de Izquierda también rechazó el DNU de Milei al afirmar que «es un plan de guerra contra el pueblo trabajador» y reclamó un «paro nacional activo».
Héctor Daer. En el plano sindical, el cotitular de la CGT advirtió que «el DNU subvierte el orden republicano democrático y altera la división de poderes» y agregó: «No vamos a tolerar el ataque a los derechos laborales, sociales y a la seguridad social».
Martín Lousteau. El presidente de la UCR indicó que si bien en el Decreto «hay iniciativas interesantes», advirtió que «cada una de ellas merece un análisis riguroso e individual y para eso está el Congreso«. A su vez, destacó: «Los DNU no se pueden modificar: se aprueban o rechazan enteros. Además, con este método, en cuatro años podría venir otro presidente y mediante otro Mega DNU hacer exactamente lo contrario, lo que agregaría más incertidumbre e inestabilidad a la que ya padecemos. Ninguna reforma de fondo duradera puede lograrse de esta forma», subrayó.
Maximiliano Ferraro. El diputado de la Coalición Cívica manifestó: «El dictado de todo DNU es para una situación excepcional. Lo anunciado por el Presidente de la Nación no cumpliría con los requisitos constitucionales del artículo 99º inciso 3º. Se procederá a la evaluación pormenorizada de cada ley derogada y/o modificada ya que el Presidente, pudiendo llamar a sesiones extraordinarias en el Congreso, optó por arrogarse facultades legislativas».
Miguel Ángel Pichetto. El diputado de Encuentro Republicano Federal, cercano a Juntos por el Cambio, recordó que la Argentina «es una República» y que «el Presidente debe gobernar con el Congreso no contra el Congreso«.