La provincia de San Luis se encuentra atravesando una compleja situación sanitaria, respecto al brote de coronavirus que mantiene en alerta a la población desde hace algunas semanas.
Según los últimos datos informados este martes por el Comité de Crisis local, al momento se contabilizan 585 casos positivos desde el inicio de la pandemia, de los cuales, 299 permanecen activos, 277 personas ya recibieron el alta médica y 9 personas murieron a causa de la enfermedad.
Por este brote de casos, las autoridades decidieron regresar al aislamiento obligatorio a muchas ciudades de la provincia, sometiendo nuevamente a los ciudadanos al confinamiento en sus hogares, a los controles policiales, a las restricciones de circulación de acuerdo a la terminación del DNI, a la prohibición de ver familiares, y fueron clausuradas muchas calles y accesos con barricadas idénticas a una película de guerra.
Ademas, se cerraron cientos de comercios y se suspendieron actividades que no son considerados esenciales, como el deporte y el turismo.
Por estos días, la ciudad de San Luis y las localidades que comprenden el denominado Gran San Luis, están cumpliendo la segunda semana de cuarentena estricta, con mucha molestia y cansancio por parte de la población. Mientras, la cuidad de Villa mercedes, este lunes también volvió al aislamiento, en principio, por 7 días.
Las autoridades se excusaron que esta vuelta al aislamiento total, fue una decisión para frenar la cadena de contagios, que no ha parado de aumentar desde que se decretó la circulación comunitaria del virus.
La presidenta del Comité de Crisis, María José Zanglá, aseguró este miércoles en radio La Bomba, que “vemos un estancamiento de los casos positivos” en la ciudad capital y sus alrededores. Este podría ser un dato alentador, ya que el viernes, el anillo sanitario establecido en la zona debería finalizar.
Lo cierto es que, lejos de comunicar la salida de la cuarentena, Zanglá indicó en dialogo con esa radio de Villa Mercedes, que “a partir de como se vaya comportando (el brote) en estas ultimas horas, en estos últimos días, vamos a permitir algunas actividades”.
Desde el Comité, esperan poder controlar la situación y mantener un promedio de contagios o bajar el número, por lo que la localidades afectadas podrían continuar en cuarentena (Fase 1 o Fase 3), y lejos estaría la posibilidad de volver a la “normalidad”.
Por su parte, la jefa del Servicio de Inmunizaciones y responsable de Alerta Epidemiológica, María Ester Diángelo, indicó a la Agencia de Noticias San Luis que “la situación epidemiológica en la provincia no es homogénea, por eso esta administración del aislamiento la vamos a adoptar en diferentes modalidades”.
Mientras, por las consecuencias económicas que conlleva la cuarentena dado el cierre de cientos de comercios y la paralización de muchas actividades, comerciantes de toda la provincia y trabajadores del sector turístico están en modo de protesta y lucha, hartos de ser perjudicados por la falta de políticas que los resguarden.
Bajo la consigna “Necesitamos Trabajar YA”, y sin un color político, los trabajadores sanluiseños reclaman la vuelta de sus actividades, “para poder comer” y para poder “pagar los impuestos”.
En tanto, a la crisis económica causada, se suma la compleja situación de salud mental de los sanluiseños y sanluiseñas que, según advirtieron especialistas, podrían comenzar a sufrir trastornos y traumas, perjudicando así el propio estatus sanitario de cada individuo.
Los vecinos de San Luis, Juana Koslay, Potrero de los Funes, El Volcán y La Punta esperan (o no), salir de la cuarentena agotadora este viernes, y comenzar a preparar la llegada de la primavera con la esperanza de que el cambio de estación mejore la situación sanitaria y económica.
Sin embargo, los villamercedinos seguirán en cuarentena estricta, en un principio y si las autoridades no deciden extenderla, hasta el lunes 21 inclusive.
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