En el extenso rastrillaje que se desarrolla por sexto día consecutivo, más de 100 efectivos están abocados a las tareas de encontrar a Módica, quien acostumbraba a realizar caminatas por senderos serranos, por lo que fue buscada también por la zona del Cerro La Banderita y en cercanías al Dique de La Falda.
Aunque ya desde el martes, tras un dato de una patrulla rural que habría visto el jueves pasado en la noche el auto de Javier Galván (37), pareja de Módica, la investigación se trasladó al camino que une La Falda y Characato, en la Pampa de Olaen.
En tanto, en la tarde de ayer, en el marco de la marcha nacional en reclamo de justicia por el femicidio de Úrsula Bahillo, cometido la semana pasada en la ciudad bonaerense de Rojas, se sumó también el pedido por la aparición de Módica, en la columna de manifestantes que se agruparon en el centro de la ciudad de Córdoba.
Por su parte, el comisario general Ariel Lecler, subjefe de la Policía de Córdoba, manifestó ayer que “no es demasiado alentador el pronóstico” en referencia a la búsqueda, aunque afirmó que “no se pierden las esperanzas de encontrarla”.
Lecler formuló declaraciones desde el denominado “punto cero” de la búsqueda, que es el camino que comunica La Falda con Characato, donde se montó el campamento de campaña para las operaciones de rastrillaje.
La búsqueda en ese sector comenzó por un dato que aportó la patrulla rural, que habría visto en la zona un auto similar al de Galván, quien fue apresado el lunes último a pedido de la fiscal de Cosquín, Jorgelina Gómez, y quedó acusado, en principio, de los delitos de “falso testimonio agravado y desobediencia a la autoridad”.
La detención y la acusación surgió a partir de las “contradicciones” en la declaración testimonial y por “violar la orden de distanciamiento” que se le impuso meses atrás, luego de una denuncia que había realizado Módica por violencia de género.
Si bien se trata de un delito excarcelable, los investigadores prefieren mantener a Galván detenido hasta tanto pueda ser hallada la mujer.