UNICEF, en el marco de sus iniciativas Municipio Unido por la Niñez y la Adolescencia (MUNA) y Oportunidades Únicas, realizó una consulta a través de la plataforma U-report sobre los desafíos que las chicas y los chicos enfrentan en la transición de la escuela al mercado del trabajo en la que participaron casi 2.500 jóvenes de 12 a 24 años de 136 municipios a nivel nacional.
“El objetivo fue relevar las percepciones y expectativas de las y los adolescentes y jóvenes en relación con su educación, sus redes de apoyo, la empleabilidad y la formación para el trabajo, con el propósito de generar insumos que contribuyan al diseño, implementación y fortalecimiento de políticas públicas de los municipios y de la iniciativa ‘Oportunidades Únicas’”, explica Mercedes Eisele, Oficial de Derechos de niñas, niños y adolescentes y sector privado de UNICEF Argentina, sobre MUNA, la iniciativa que trabaja desde el 2021 para que los municipios pongan en el centro de sus políticas la agenda de derechos de las chicas y los chicos.

Si bien la mayoría se dedica exclusivamente al estudio (65%), hay un 16% que combina estudio y trabajo y un 11% que, mientras estudia, busca empleo. El principal desafío que perciben, entre las y los adolescentes, prevalece la falta de conocimiento sobre cómo buscar trabajo, mientras que entre las y los jóvenes se destacan los requisitos y exigencias del mercado y la escasez de oportunidades.
Entre las herramientas escolares que más valoran para el mundo del trabajo, las chicas y los chicos destacan el aprendizaje de comunicación y expresión oral y escrita, matemática y finanzas personales, informática y el trabajo en equipo; sin embargo, la mitad de las chicas y los chicos afirma que la escuela no los prepara para el mundo laboral y sostienen que les gustaría aprender sobre educación financiera y el uso de la tecnología aplicada al trabajo; tener simulacros de entrevista y armado de currículums; y tener orientación vocacional y laboral, lo que muestra una demanda clara de formación práctica y contextualizada.
Consultados por sus aspiraciones laborales en el futuro, las respuestas son diversas: mayoritariamente desean trabajar en empresas grandes (34%); sin embargo, también hay quienes tienen interés en hacerlo de forma independiente (17%), en el sector público (15%) y en comercios o tiendas (12%). Y en cuanto a sus expectativas, desean obtener un buen salario y estabilidad económica, trabajar en un entorno positivo y hacerlo en algo que les guste, y contar con flexibilidad para compatibilizar con sus estudios o vida personal.
“Es muy importante que las personas adultas tengamos la capacidad de brindarles a las y los adolescentes un espacio de escucha y contención y que generemos oportunidades de conversación”, sostiene Luciana Lirman, Oficial de Comunicación y Participación adolescente de UNICEF.
A la consulta sobre sus redes de apoyo, las chicas y los chicos afirman que en primer lugar recurren a sus familias (42%), seguido por sus amigas y amigos (19%) y compañeras y compañeros (11%). Sin embargo, hay un 14% que señala que no tiene con quien hablar sobre su futuro.
“Por eso desde MUNA buscamos que los gobiernos locales puedan brindar herramientas para la implementación de acciones a nivel local que potencien las capacidades institucionales, a fin de que la opinión de las chicas y los chicos sea tenida en cuenta”.
MUNA otorga formación, herramientas y asistencia técnica a municipios en 12 líneas temáticas – como primera infancia y entornos saludables, inclusión educativa, salud adolescente y entornos libres de violencia, discapacidad, entre otras más – con el propósito de generar políticas y respuestas en función de las necesidades de cada gobierno local.
Entre sus líneas de trabajo, la de Participación adolescente promueve el derecho de las y los jóvenes a involucrarse activamente, que expresen su opinión y participen en la vida familiar, comunitaria, social y en la toma de decisiones.
Además, el sector privado es un actor fundamental para desarrollar acciones colectivas que aseguren el bienestar presente y futuro de las chicas y los chicos. En ese marco, la iniciativa “Oportunidades Únicas” busca promover, en conjunto con adolescentes y empresas, instancias de formación y generación de habilidades para la vida adulta que incorporen los enfoques de equidad, género y propicien la participación de los y las adolescentes.
Estos resultados ofrecen un panorama actualizado sobre los desafíos que enfrentan las chicas y los chicos para acceder al mundo del trabajo y constituye una herramienta concreta para que los municipios puedan diseñar políticas más efectivas, informadas por quienes viven esa realidad en primera persona.
Fuente: UNICEF Argentina