¿Qué pasó? Un reciente escándalo se desató en Reino Unido luego de que una investigación periodística revelara la existencia de rastros de cocaína en diferentes lugares del Parlamento británico, incluyendo baños cercanos a la oficina de primer ministro, Boris Johnson.
El escándalo. El semanario The Sunday Times publicó el domingo un informe que afirma que al menos diez lugares dentro del Parlamento, que abarcan sitios para legisladores, funcionarios gubernamentales y su personal, dieron positivo en rastros de cocaína.
Las áreas incluyeron los baños de mujeres más cercanos a la oficina del primer ministro y los que están cerca de la oficina de la ministra del Interior, Priti Patel, quien también es diputada, según el diario.
Rastros de cocaína. El dominical agregó que de los 12 baños examinados para detectar drogas, se encontró cocaína en 11 lugares, incluidos sitios a los que solo pueden acceder aquellos con un pase parlamentario designado, que permite la entrada a legisladores y empleados junto con bibliotecarios y personal de seguridad, mozos y periodistas.
El periódico aseguró que “muchas fuentes han descrito consumo ocasional de cocaína por parte de un grupo de diputados“. Asimismo, afirmó que dos vendedores de droga fueron arrestados, mientras que otras 13 personas detenidas por poseer sustancias ilícitas “dentro o en el entorno del recinto parlamentario”. Las detenciones ocurrieron durante el 2021.
Declaraciones. El presidente de la Cámara de los Comunes, Sir Lindsay Hoyle, dijo ayer a BBC que “los informes de The Sunday Times eran profundamente preocupantes” y que lo planteará “como una prioridad con la Policía Metropolitana” esta semana. “Espero ver la aplicación total y efectiva de la ley”, agregó.
Tendencia en redes. El hashtag cocaína (#cocaine) se convirtió en una de las principales tendencias de Twitter en Reino Unido a raíz del informe de The Sunday Times. Cuando se le preguntó sobre las acusaciones de uso de drogas en el Parlamento, Johnson dijo hoy a Sky News que el Gobierno “está absolutamente decidido a luchar contra las drogas“.
Contexto. El informe se produce en medio de una nueva ofensiva contra el uso de drogas ilegales en el Reino Unido, y el propio Johnson ha propuesto que a los consumidores de drogas se les podría quitar el pasaporte y el permiso de conducir. A finales de esta semana, se espera que Johnson lance un plan de 10 años para abordar los delitos relacionados con las drogas ilegales.