En medio de la pandemia, las autoridades sanitarias de San Luis comunicaron que el Banco Central de Sangre registró una importante cantidad de donantes que, a pesar de la pandemia, salieron de sus casas para contribuir a salvar vidas y a mejorar la salud.
Según informó el Banco Central de Sangre de la Provincia, durante abril y mayo se incrementó en un 121% la donación en comparación con los primeros meses del 2020. Mientras que en el resto de la Argentina, se registró una baja de donantes de hasta un 80% en algunas jurisdicciones, debido a la pandemia de coronavirus y a las medidas de confinamiento.
“El Banco Central de Sangre, dependiente del Ministerio de Salud, agradece profundamente a todas las personas que se sumaron a la campaña de donación voluntaria de sangre, que fue promovida por el Gobierno de San Luis, a través del Comité de Crisis”, comentó la responsable del Servicio de Hemoterapia y Banco de Sangre, Andrea Torressi, citada por la Agencia de Noticias estatal.
Torressi, además explicó que haber realizado la campaña permitió contar con sangre segura, que está siendo distribuida a los diferentes hospitales para realizar tratamientos esenciales y así mejorar o salvar vidas.
En tanto, otros responsables del Banco comentaron en Nox.com.ar que han tenido «una respuesta muy grande durante estos meses» y ahora retiran el pedido para que no se frene la donación «ya que disminuye la afluencia por el motivo de que muchos comenzaron actividades laborales y la sangre donada dura 30 días».
La importancia de donar sangre
«Donar sangre es donar vida», escuchamos cientos de veces en todas las campañas, y es que esto es así. Con la sangre donada, otras personas pueden realizar tratamientos de determinadas enfermedades, y también sirve para salvar vidas que corren peligro en situaciones médicas de extrema gravedad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), «la sangre y los productos sanguíneos son elementos esenciales para el tratamiento apropiado de las mujeres con hemorragias asociadas al embarazo y al parto; los niños que padecen anemia grave a causa del paludismo y la malnutrición; los pacientes con trastornos hematológicos y de médula ósea, trastornos hereditarios de hemoglobina e inmunodeficiencia; las víctimas de un traumatismo, emergencias, desastres y accidentes, así como los pacientes que se someten a intervenciones médicas y quirúrgicas avanzadas.
Sobre las campañas de donación, la OMS destaca que sirven «para concienciar de la necesidad de hacer donaciones regulares para tener acceso oportuno y asequible a sangre y productos sanguíneos seguros y de calidad, como parte integral de la cobertura sanitaria».
Cómo donar sangre en San Luis
Los vecinos de la provincia que quieran colaborar, pueden informarse en el sitio web dona.sanluis.gob.ar o mediante la página de Facebook del Banco de Sangre de San Luis.
Quienes residan en la ciudad capital, pueden llamar al al teléfono 2664511072; en Villa Mercedes, al 2657201907; y en Merlo al 2656473712.
Entre los requisitos para ser donantes, las autoridades sanitarias provinciales informaron que las personas deben, tener entre de 18 a 65 años (presentarse con DNI), deben presentar buen estado de salud general, pesar más de 50 kilos, no estar transitando un periodo de embarazo, no haberse hecho un tatuaje o un piercing en el último año y no tener prácticas sexuales de riesgo para la transmisión de enfermedades.
Además, en el contexto de pandemia que atraviesa el mundo, para donar en los centros de salud de San Luis, las personas deben cumplir estos requisitos adicionales a los informados previamente.
- No haber vuelto de viaje de países con circulación de coronavirus en los últimos 30 días.
- No haber viajado a otras provincias del país donde hay circulación del virus en los últimos 15 días.
- No haber tenido contacto con un caso sospechoso o confirmado en los últimos 30 días.
- No haber tenido fiebre, tos, dolor de garganta en los últimos 15 a 30 días.
- Desayunar evitando los alimentos que contengan lácteos y grasa.
- Antes de la donación se hará una entrevista médica más exhaustiva, que hay que responder honestamente para proteger a los pacientes receptores.