La segunda temporada de División Palermo ya está disponible en Netflix y confirma el éxito de una fórmula poco convencional: el humor ácido, inteligente y sin concesiones. La serie continúa burlándose de los discursos políticamente correctos con una sátira que incomoda y hace reír a partes iguales, en un contexto social donde lo que se dice -y cómo se dice- es más vigilado que nunca.
Con personajes entrañables y situaciones absurdas, esta nueva entrega mantiene el tono irreverente que la convirtió en un fenómeno desde su estreno.
Lejos de repetirse, la serie expande su universo con nuevas tramas y conflictos que siguen apelando al absurdo argentino para hablar de temas tan serios como la inclusión, la seguridad o el poder institucional.
División Palermo no solo ofrece risas aseguradas para una buena maratón, sino también una crítica punzante sobre cómo se construyen y consumen ciertos discursos en la sociedad actual. Una apuesta sólida del humor nacional que confirma su lugar en el catálogo de comedias más originales de la región.