La entrega de alimentos a domicilio, la inclusión de personas trans en planes sociales y experiencias autogestivas de producción de insumos son algunas de las acciones que se están realizando en Santa Fe para acompañar a personas en prostitución en el contexto de la pandemia de coronavirus, medidas que dirigentes sociales consideraron “un paliativo” y solicitaron “políticas públicas concretas”.
La pandemia de coronavirus y la necesidad de aislamiento para impedir la propagación del virus profundizan la problemática de las personas en situación de prostitución, una de las poblaciones de riesgo, por lo que en Santa Fe hay organizaciones que realizan acciones para obtener recursos, que a su vez son condicionadas por la cuarentena.
Es el caso de Mujeres en Actividad, que en la ciudad de Santa Fe organizó a una decena de mujeres en esa situación para la fabricación y venta de huevos de Pascua, aunque desde la entidad aclararon que se trata de un paliativo, pues lo que se necesitan son “políticas públicas concretas”.
Elena Moncada, titular de esa ONG, señaló en diálogo con la agencia Télam que la idea es poder hacer algo para ayudar a las compañeras en la emergencia porque “la mayoría la está pasando mal, con carencias básicas como la alimentación”.
“Lo que necesitamos son políticas públicas concretas, como el programa ‘Hacemos futuro’, a través del cual las compañeras podían terminar estudios primarios o secundarios, ojalá terciarios. Eso es lo que se necesita, porque el Estado te puede dar una ayuda, un subsidio, pero es poco dinero y dura cuatro meses. Después no queda nada”, indicó Moncada.
A su vez, la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (Ammar), organiza por estos días una colecta de dinero que repartirá entre sus delegaciones de todo el país para afrontar gastos de primera necesidad, como el pago de los lugares de alojamiento donde residen la mayoría de sus 6.000 afiliadas.
Moncada, que estuvo en situación de prostitución durante 18 años y escribió los libros “Yo elijo contar mi historia” y “Después, la libertad”, se define “extremadamente abolicionista” y considera que las mujeres y personas trans y travestis en situación de prostitución “no tienen clientes, sino prostituyentes o violadores”.
Indicó luego que desde la organización que conduce pretenden “empoderar a las compañeras” y que no consideran que la prostitución sea un trabajo “porque no queremos ni a nuestras hijas ni a nuestras nietas paradas en las esquinas, (donde) tenemos niñas de 12 años hasta mujeres de 72”.
La activista consideró además que se trata de una cuestión de concientización: “Que la gente sepa que la piba no está en la esquina porque le gusta, porque es más fácil o porque no quiere estudiar o trabajar, sino que se trata de falta de oportunidades”.
Sobre la actual coyuntura, y la imposibilidad de las personas de procurarse el sustento de la forma habitual, la Secretaría de Género e Igualdad de la provincia realiza junto a los municipios la entrega de módulos alimentarios y kits de higiene, a la vez que estudia cómo canalizar las ayudas económicas que se instrumentaban a través de los bancos.
No obstante, voceros oficiales consultados por la agencia reconocieron que “hay muchas situaciones distintas, y entre ellas hay casos en los que un bolsón de alimentos no resuelve la emergencia”.
Otras fuentes consultadas por Télam señalaron que pese a las medidas de aislamiento social impuestas por decreto, hay lugares en los que se siguen observando personas ejerciendo la prostitución.
“La policía las intima, incluso hubo detenidas por violar el aislamiento, pero algunas vuelven porque no tienen para comer”, graficó uno de los voceros.
El Estado provincial enfoca sus acciones en términos de poblaciones de riesgo, y en ese sentido se reforzó la actividad del centro de día para personas trans de Rosario, donde se entregaban viandas y ahora, por el aislamiento social, se estableció un circuito para llevarlas a domicilio o que sea retirado en otro lugar de a varias.
La Secretaría, en coordinación con el Ministerio de Géneros, Mujeres y Diversidad de Nación articula la inclusión de la población trans-travesti en el programa Hacemos Futuro, orientado a facilitar herramientas para finalización de estudios y capacitación en oficios.
Según la Federación de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans, un informe realizado por esa institución en 2015 reveló que el 90 por ciento de las personas travestis y trans no tiene trabajo formal y que el 95 por ciento está en situación de prostitución.
Con información de Télam – Foto de Ammar.