Tres testigos complicaron hoy la situación del senador provincial Ariel Rosendo (PJ), acusado de robo en poblado y en banda, violencia de género contra su expareja y violación del aislamiento social dispuesto por el coronavirus, en la segunda audiencia que se realizó ante el juez penal de la ciudad de Villa Mercedes, Leandro Estrada.
Fuentes judiciales informaron que entre los testimonios, se encuentra el de un fletero que fuera contratado para hacer “la mudanza” de la vivienda ubicada en Italia 426 de esa ciudad, que se denuncia en el expediente, como violentada por el senador.
En ese domicilio residía su expareja y es propiedad del gremio SMATA en esa ciudad.
En su declaración, el trabajador reconoció haber sido contratado por el senador para realizar el traslado de objetos que se encontraban en el lugar, pero alertado por la forma violenta del ingreso a la vivienda, desistió de hacer el trabajo porque se dio cuenta que “la mudanza no era tal y estaba frente a un ingreso forzado”, relató hoy ante la justicia.
Esto hizo que se alejara del lugar “por miedo” hasta que el senador lo llamo para “cargar las pertenencias en su flete, a lo que él se negó y ante la llegada de un móvil policial pudo ver “con sus propios ojos” como Rosendo “sacó su billetera del bolsillo”, tras lo que el patrullero se fue del lugar.
Luego -recordó- cargaron todo en su camioneta, lo que obligó a “su hija” a viajar con medio cuerpo afuera para tratar de retener un sommier de dos plazas que trasladó en el techo del vehículo, recordó.
A este testimonio, se le sumó el de un cerrajero que corroboró que debió “reparar la cerradura de la vivienda” que había sido violentada y el de una policía que tomó las fotografías en el interior de la casa.
La vivienda fue desvalijada y se pudo comprobar que “era habitada por una mujer” ya que se encontraban en el lugar cosméticos y ropa femenina a la vista.
La abogada de la exesposa del senador, Leticia Latini, dijo hoy a la agencia Télam que luego de estas rondas de testigos, espera que de manera “urgente se produzca toda la prueba” y el juez “procese con prisión preventiva” al legislador porque “está más que probado que robó y que es una persona muy peligrosa, con un actuar delictivo que no reconoce límites”.
En ese contexto aclaró que el testigo fundamental de la audiencia de hoy dejó sentado su temor a ser “víctima de la violencia del senador“, ya que lo “conoce y sabe cómo actúa” por lo que teme por “la seguridad de su familia”.
Por otra parte, el secretario general del gremio SMATA, Juan Piturra, que fue citado a testimonial por la defensa de Rosendo “viajó y se presentó pero no pudo declarar porque el abogado de la otra parte estuvo ausente”, aclaró Latini.
En la causa, se espera la realización, durante esta semana, de las audiencias testimoniales para completar la prueba y la decisión del Senado provincial sobre la situación del legislador en el cuerpo, al que se le solicitó el desafuero.
Con Télam.
